Hammid
Hammid limpia cuidadosamente la frutería cada mañana. Le gusta el olor del melocotón, el chorrear de la sandía en verano, que los niños toquen la fruta creyendo que el no les ve porque si rompen algo, no pasa nada. Ojala sus hijos estubiesen ahi para romper algo, piensa.
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